Un paseo normal por Monte...
A
solo 110 kilómetros de Buenos Aires sobre la ruta nacional 3, San Miguel del
Monte tiene suficientes atractivos para diferentes planes: una escapada
romántica, con amigos, en familia o solo, y se puede conocer en un día o
disfrutar tranquilamente un fin de semana.
Monte es una de las ciudades más
antiguas de la provincia de Buenos Aires, sus calles son tranquilas y en ellas
hay desde locales, bares hasta clubes y canchas de polo. Tiene ese secreto de
pueblo donde la siesta es casi un decreto y el mate es un ritual en la
costanera, junto a la famosa laguna, todo a mano.
Podemos empezar el recorrido de este
pueblo con historia en la plaza Adolfo Alsina -en las calles Laura Giagnacovo,
Alem, Petracchi e Hipólito Yrigoyen-, que tiene una ornamentación muy vistosa y
pérgolas. Los fines de semana y feriados, sobre la explanada municipal y esta
plaza se organiza el Paseo de los Artesanos, donde se ofrece gran cantidad de
productos locales, como trabajos en madera, cerámicas, vidrios grabados y
tejidos, entre otros.
Sobre Laura Giagnacovo e Hipólito
Yrigoyen está el templo parroquial San Miguel Arcángel, que fue inaugurado en
1867. De estilo colonial, intervinieron en su decoración artistas como Héctor
Butler y Raúl Soldi, entre otros, y en 1980 fue declarado monumento nacional.
Justamente el nombre de la ciudad deriva
de la protección pedida por los milicianos a San Miguel Arcángel, y el 18 de
noviembre de 1779 comienzan la construcción de la capilla del fuerte, tomándose
esa fecha como su fundación.
Siguiendo hacia Juan Manuel de Rosas y
Belgrano nos encontramos con lo que se conoce como el Rancho de Rosas.
Realizado en adobe, troncos de palmeras, techos de pastos trenzados y tirantes
de caña se encontraba en la estancia Los Cerrillos, y su traslado a este solar
fue en 1987. Hoy es la única vivienda que queda en pie de Rosas y son 4
habitaciones de rápido recorrido.
Se puede visitar de lunes a miércoles,
de 8 a 12; jueves y viernes, de 8 a 16, y sábado, domingo y feriados, de 10 a
16.
A pocos pasos de ahí, en Belgrano entre
J. M. de Rosas y Pinazo, está el Museo Municipal Guardia del Monte, que alberga
gran cantidad de piezas como ánforas, vestidos de época, el sello epistolar de
Manuelita Rosas, que es propiedad del Museo de Luján; documentación sobre el
hospital Zenón V. Dorna, la Sala de Arqueología Urbana del Siglo XIX, restos
fósiles encontrados en el río Salado, una carreta de 1885 y algo curioso: el
acta de matrimonio por iglesia del ex presidente Juan Domingo Perón con María
Eva Duarte, entre otras cosas.
El museo se puede visitar de lunes a
miércoles, de 8 a 12; jueves y viernes, de 8 a 16, y sábado, domingo y
feriados, de 10 a 16. El bono contribución tanto del rancho como del museo es
de 5 pesos; menores de 12 años, gratis.
Caminar las calles de este pueblo es
transitar parte de la historia argentina, pero si el paseo no es precisamente
conocer su semblanza, sino pescar, las lagunas Las Perdices y de Monte son el
sito ideal; esta última se divide en dos zonas: la de pesca, donde se podrán
obtener dientudos, bagres, pejerreyes y otras especies, y la de motonáutica,
para practicar jet ski, windsurf, velerismo, canotaje y demás.
La costanera se encuentra iluminada y a
su alrededor hay lugar para acampar, alquilar botes, bicicletas o caballos, con
una variedad de campings y hotelería para todos los gustos, desde hoteles con
spa hasta aparts.
Entre las fiestas más importantes está
la Semana de la Federación, que se celebra el 22 de marzo, recordando la
partida de Juan Manuel de Rosas a la Expedición al Desierto; en este encuentro
se puede disfrutar de almuerzos criollos, desfiles y actuaciones de cantores
locales, y el 18 de noviembre, su aniversario.